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Mientras se duerme, el cuerpo hace un montón de cosas extrañas sin que nos demos cuenta

Tranquilo. Es algo normal. Estas son algunas cosas extrañas y sorprendentes que nuestro cuerpo realiza cada vez que dormimos:

1. Los músculos se paralizan

Cuando dormimos los músculos se desconectan del cerebro. Puede resultar inquietante, pero tenemos que dar suerte a que suceda. Eso es lo que impide que usted se mueva incontroladamente mientras sueña y pueda por ejemplo lesionarse o lesionar a la persona que tiene al lado.

2. Los ojos se mueven (REM)

Esto nos parece más normal y que todos sabemos que en la fase del sueño los ojos se mueven en todas direcciones. Este fenómeno se denomina “movimiento rápido de ojo” (del inglés Rapid Eye Movement ).

Estos movimientos acompañan a la labor de memorización que se realiza durante esa fase de sueño, pero los investigadores desconocen exactamente a qué se debe. Todo un misterio. Eso si, se sabe que a veces el movimiento está directamente relacionado con el contenido del sueño. Por ejemplo, si soñamos con un partido de tenis, nuestros ojos irán de izquierda a derecha y de derecha a izquierda, como si estuviesen siguiendo la pelota por la cancha.

Y más curioso aún, las personas ciegas, en vez de mover los ojos, hacen ruidos y movimientos con otras partes del cuerpo.

3. Se crece

Las abuelas tenían razón…  — Este niños no crece porque no duerme bien —. No quiere decir que vayamos a despertarnos un día con la altura de un gigante, pero es un hecho que mientras se duerme, se crece.

Los discos de cartílago situados entre las vértebras se comportan como cojines o amortiguadores, re-hidratándose e inflándose durante la noche, cuando no tienen que soportar el peso del cuerpo en posición vertical. Tiene mucha lógica.

Para maximizar los efectos del crecimiento se recomienda dormir de lado y en posición fetal, pues el peso que debe soportar su espalda se reduce todavía más en esta posición.

4. La presión sanguínea disminuye

También tiene mucha lógica. Mientras estamos acostados, nuestro corazón no tiene necesidad de bombear tan fuerte, por los que se ralentiza, las arterias se relajan y la presión sanguínea disminuye, permitiendo “descansar” a todo el sistema cardiovascular.  De hecho, las personas que sufren hipertensión deben dormir mucho y bien,  ya que esto reduce el riesgo de accidente cardíaco.

5. Se sufren sobresaltos

calidad del sueñoA todos nos ha pasado… Estamos a punto de quedarnos dormido y de pronto…  ¡un sobresalto enorme! Es algo normal; de hecho, el 75% de la población conoce este fenómeno.

Pueden ser sobresaltos en los que todo el cuerpo se ve implicado o que afecten únicamente a las piernas, las manos o los brazos. Por lo general van acompañados de una sensación de pérdida de equilibrio y a veces de un grito incluso.

No tiene que preocuparse, ya que solo en casos excepcionales esconden una causa grave. Por lo general es un fenómeno completamente normal que los médicos llaman espasmos mioclónicos. Eso sí, si a usted le gusta acurrucarse junto a su pareja lo más sensato es que se separen antes de quedarse dormidos, pues corren el riesgo de despertarse mutuamente con estas sacudidas y con un ojo morado.

6. Se emiten gases

Esto puede ser un tanto desagradable,  pero lo cierto es que el esfínter se relaja por la noche, aumentando el riesgo de que los gases se escapen.  Pero no pasa nada, el sentido del olfato se reduce notablemente durante el sueño, por lo que las ventosidades resultan imperceptibles.

Un dato curioso. Las alarmas acústicas de incendio se inventaron debido a este hecho, ya que hay pocas probabilidades de que alguien pueda percibir el olor a quemado mientras duerme y cuando se despierte debido al calor intenso ya será demasiado tarde.

7. La piel rejuvenece

Eso gustará a muchas mujeres de mediana edad. Al dormir el cuerpo está en estado de ayuno y el organismo produce la hormona del crecimiento para obligar a las células grasas (adipocitos) a liberar grasa para que actúen como fuente de energía. Esa misma hormona estimula la producción de colágeno, una proteína que forma parte de la composición de los huesos, los vasos sanguíneos y la piel.

 

8. La temperatura corporal baja

Esto también lo sabemos todo. Cuando estamos quedándonos dormidos tiramos la manta al suelo, pero cuando nos despertamos a media noche, estamos tapados hasta el cuello.

Resulta que justo antes de dormirse, la temperatura del cuerpo baja drásticamente, desencadenando la producción de melatonina, la hormona del sueño que regula el reloj biológico (ritmo circadiano).

La temperatura corporal alcanza su mínimo cuando llevamos unas 4 a 5 horas dormidos, hora en la que nuestra pareja, de manera totalmente involuntaria, trata de “robarnos” la manta con la que tan agusto estamos acurrucados.

9. Hay excitación sexual

Eso es así. Tanto hombres como mujeres experimentan episodios de excitación sexual durante el sueño. Además esto no tiene nada que ver con los sueños.

El cerebro está más activo durante el sueño, lo que aumenta su necesidad de oxígeno y flujo sanguíneo, así como en el resto del cuerpo. Eso es lo que provoca los “despertares intempestivos” de ciertas partes del cuerpo. Nada más.

¿Y usted como duerme?

Algunas personas son más trasnochadoras y otrasdormir mal no ayuda a descansar más dormilonas. Hay personas que están más activas de noche y otras que a partir de las 20h no pueden con su cuerpo, pero que a las 6 de la mañana son muy activas.

Y también hay quienes están frescos como una lechuga pese a dormir unas horas y otros que están siempre agotados, duerman lo que duerman. De hecho si usted es de los que está siempre cansado, es posible que se deba a que no duerme bien. Si es así, o hace algo por mejorar la calidad del sueño o continuará agotado por siempre.

 

 

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