La blefaroplastia sin cirugía se utiliza para mejorar el aspecto de los párpados y eliminar las bolsas de los ojos. Este tratamiento de medicina estética corrige el exceso de piel inferior y superior y la acumulación de grasa en el contorno del ojo. Además, su principal ventaja es que se trata de un procedimiento no quirúrgico,capaz de solucionar los problemas de ojeras hundidas, moradas y oscuras.
Diferencias entre blefaroplastia sin cirugía y quirúrgica
Al hablar de la blefaroplastia sin cirugía tenemos que tener presente que su funcionamiento es a corto y medio plazo. Nada que ver con la cirugía de párpados tradicional, más a largo plazo.
La blefaroplastia tradicionales capaz de cambiar el aspecto en tan sólo unas horas. En cambio, los procedimientos sin cirugía tienen que actuar durante más tiempo, rebajando poco a poco la acumulación de grasa y disminuyendo, a medida que tensa la piel del párpado la parte sobrante.
El objetivo de un tipo u otro de blefaroplastia es el mismo: eliminar las bolsas de los ojos y mejorar el aspecto.
Cómo es la blefaroplastia sin cirugía
El procedimiento consiste en inyectar diferentes sustancias bajo el párpado, para poder realizar una eliminación química de la grasa. También se busca fomentar la tensión en la zona y dar una apariencia más joven a los párpados, reduciendo el pellejo de la comisura de los ojos que tiene flacidez.
En su tratamiento pueden utilizarse diferentes sustancias. Unas actuarán deshaciendo el tejido adiposo y otras proporcionando tersura o tensión.
Qué tipo de personas son las adecuadas para someterse a un tratamiento de blefaroplastia sin cirugía
Principalmente personas jóvenes, menores de 40 años, que tienen una ligera distensión en el párpado pero todavía es pequeña. También es recomendado para personas que sienten aprensión al quirófano y prefieren métodos alternativos.
Aunque la blefaroplastia sin cirugía no consigue restaurar por completo el aspecto original de los ojos, sí que es posible rejuvenecer notablemente los párpados y conseguir grande mejoras en las bolsas oculares y la piel.
¿Cómo son los resultados de la blefaroplastia sin cirugía?
Al ser un tratamiento diferente a los métodos tradicionales o clásicos, los resultados que se logran también son diferentes. La cirugía logra corregir muchos de los síntomas pero necesita la entrada en un quirófano y un postoperatorio. En cambio, la blefaroplastia sin cirugía puede reducir las bolsas en los ojos o proporcionar un relleno para las zonas deprimidas de la cara, creando un rejuvenecimiento del rostro.
La ventaja de este tipo de procedimiento sin cirugía es que los resultados son inmediatos. Después de realizarlo es posible que exista una inflamación leve, pero aún así es evidente la mejoría. Después de tan sólo unos días los efectos finales pueden ser apreciados.