En este breve post, trataremos sin embargo un tema muy delicado e importante… ¿qué hacer si tu hijo se atraganta comiendo y no puede respirar? Conviene estar preparados para actuar rápidamente ante esta situación, que puede generar gran ansiedad y convertirse en un problema grave.
Os ofrecemos varias pautas con las que podrás hacerle frente a este problema más común de lo que puede parecer:
¿Qué síntomas son lo que deben alarmarte?
A lo mejor el ahogo puede no llamar la atención al principio. Sin embargo podemos sospechar que un niño se está atragantando, o tiene un cuerpo extraño en la vía aérea, si ha está comiendo o ha estado jugando con objetos pequeños y de repente empieza con síntomas evidente de atragantamiento: tos continua (ante la presencia de una obstrucción en la vía respiratoria, el organismo reacciona con tos, en un intento de expulsarlo), dificultad para respirar, coloración morada en los labios o mofletes, etc.
Suele solucionarse espontáneamente
La mejor noticias es que en la mayoría de los casos que se dan entre niños de los 6 meses y los 6 años, todo se soluciona espontáneamente con la tos. Solo del 10 al 20% requiere asistencia médica y el 1% precisa una intervención quirúrgica urgente.
La importancia de una asistencia correcta
Si surge la situación, lo más importante es mantener la calma y actúar siguiendo estos pasos:
Primer paso
Si el niño es mayor de 7 u 8 años, tose y respira aunque sea con dificultad, no se debe intervenir salvo para animarle a que siga haciéndolo, con tranquilidad. Ahora, si se trata de un lactante, hay que dejarle toser y nunca se debe zarandear. Esto podría provocar lesiones cervicales, cerebrales u oculares más importante que el mero ahogo momentáneo.
Si la tos resulta efectiva… …tendrá llanto, responderá a preguntas con gestos, tendrá tos enérgica o se observará que es capaz de coger aire antes de toser. En tal caso no es necesario realizar ninguna maniobra adicional, salvo observar con atención su evolución y animarle a que siga tosiendo.
Si la tos no es eficaz… …será incapaz de vocalizar, habrá una parada brusca de la tos, no podrá respirar adecuadamente, se pondrá morado o disminuirá el nivel de consciencia. Guarda la calma en la medida de lo posible y pide ayuda en el 112.
Si el niño está aún consciente, colócalo boca abajo sobre tus rodillas y dale golpes secos en la espalda con la palma abierta. Si ves que no funciona, dale la vuelta al niño y mantén su cabeza hacia abajo. Con dos dedos realiza una compresión del tórax (si es menor de 1 año). Si el niño es mayor de 1 año, puesto de pie se puede realizar compresión abdominal (maniobra de Heimlich) con mucho cuidado.
Si expulsa el objeto, vigila en todo momento su estado y cualquier cambio en su respiración (por si queda algo del cuerpo extraño en la vías aéreas). Ten en cuenta que la maniobra de Heimlich (compresiones abdominales) pueden lesionar las vísceras o costillas. Ante la menor duda, llévale al médico.
¿Y si el niño ha perdido el conocimiento?
En este caso la cosa es mucho más seria. Esto es lo que tendríamos que hacer:
- Es fundamental que pidas ayuda médica inmediatamente, aunque sin dejar al niño solo durante ese momento (recuerda que el número de emergencias es el 112).
- Después, abre la boca en busca de la obstrucción, de manera que si está visible y accesible, se puede intentar extraer haciendo pinzas con los dedos, teniendo especial cuidado para no introducirlo más y bloquear la vía respiratoria totalmente.
- Si no se ve el cuerpo extraño o este no está a tu alcance, lo suyo es realizar cinco respiraciones boca a boca. Si se trata de un bebé, tendrás que sellar completamente la boca y la nariz del niño con tu boca (al ser de meno tamaño); si se trata de un niño más mayor, tienes que sellar solo su boca con la tuy y taparle la nariz con dos dedos. Hay que insuflar aire hasta comprobar que sube el tórax con cada espiración tuya.
- Después, si persiste la falta de respuesta, habría que empezar con la Reanimación Cardiopulmonar o RCP con repeticiones de 15 compresiones torácicas (hay que comprimir el tórax un tercio de su diámetro anteroposterior) y dos insuflaciones de aire, chequeando que con estas se eleva el tórax.
- Si el niño recupera por fin la consciencia, colócalo en posición lateral (posición de seguridad) hasta que llegue la ayuda médica. Si no la recupera, sigue manteniendo la RCP hasta que llegue la ayuda.
En resumen. Ante un situación de ahogamiento de in niño, lo primero es mantener la calma y llamar al 112. Después seguimos las instrucciones de este post, siempre utilizando el menos común de los sentidos: el sentido común, para no provocar más daños que el propio ahogo.